Mensajes de Jesús Buen Pastor a Enoc, Colombia

 

lunes, 23 de agosto de 2010

¡Urgente Llamamiento a los Hombres de Buena Voluntad!

Yo Soy Miguel Arcángel: Príncipe de los Ejércitos de Mi Padre y Guardián Inseparable de Nuestra Señora y Reina María

 

hermanos: que como Dios, que como Dios, que como Dios. Aleluya, Aleluya, Aleluya. Que la paz del Altísimo Dios esté con vosotros.

Yo soy Miguel el Arcángel, Príncipe de los Ejércitos de mi Padre y Guardián Inseparable de Nuestra Señora y Reina María.

Hermanos: La hora de la Justicia Divina está a punto de comenzar; después de la Advertencia comenzará la batalla por vuestra libertad. Las trompetas están a punto de sonar; el grito de emancipación se escuchará en todos los confines de la tierra. Vuestro tiempo se ha acabado; los Ejércitos de mi Padre ya están alineados; solo esperamos la orden para comenzar a segar la cosecha. Reúnanse alrededor de Nuestra Señora y Reina María; invoquen mi protección y la protección de los Arcángeles y Ángeles del Reino de mi Padre; estén listos Ejército Militante, unan sus oraciones con los Ejércitos Celestiales, para que juntos podamos derrotar a Satanás y a sus huestes del mal de la faz de la tierra.

¿Ya saben cómo me llaman? Digan tres veces: ¿Quién como Dios, Quién como Dios, Quién como Dios, Miguel significa: ¿Quién como Dios; invocadme y vendré con la velocidad del pensamiento para asistirlos. No teman, hermanos, los acontecimientos que se avecinan sobre vosotros; si sois de Dios, no tenéis razón para temer; pues mi Padre me ha dado órdenes de protegeros en todos vuestros caminos y batallas espirituales. Invoquenme y vendré gustosamente a ayudaros. Les recuerdo hermanos: deben permanecer en la gracia de Dios; vístanse con su armadura Espiritual de Efesios 6, 10 a 18 y el refuerzo del Salmo 91; aprendan esta armadura de memoria y enseñenla a otros para que puedan permanecer protegidos; no olviden rezar el Santo Rosario; unidos espiritualmente a Nuestra Señora y Reina María; hagan también mi Exorcismo dado a Papa León XIII, y el Chaplet a los Ángeles mis hermanos, junto con mi oración de protección; que toda esta armadura alcance también a vuestros hermanos y familiares para que todos estén protegidos por la misericordia de mi Padre.

Hermanos: El Cielo llora junto con Nuestra Señora y Padre, por toda la degradación y por todo el pecado de esta humanidad ingrata; no saben cuánto sufrimos al verlos pecar y profanar el Santo Nombre de Dios. La humanidad marcha hacia el exilio a causa de la ausencia de Dios en sus vidas: el incumplimiento de los preceptos Divinos, la vida fácil, el modernismo y los cuidados de este mundo están llevando al hombre de estos últimos tiempos a su propia perdición. El pecado del hombre de hoy ha superado todos los límites; ya pecan y ofenden a Dios por costumbre; el pecado como un ultraje al Espíritu de Dios, ya no existe en la mente de esta humanidad perversa y malvada; el infierno mismo se asusta por la maldad de los hombres de estos últimos tiempos.

¡Ay de vosotros los mortales que dais la espalda al Dios de la vida, pues vuestros días están contados! El inframundo los espera; vuestro amo los espera para darles la muerte eterna. Habrá llanto y rechinar de dientes, y no habrá Dios que los escuche.

Les llamo hermanos que son rebeldes, tibios de corazón, mal vividos, alcohólicos, drogadictos, prostitutas, homosexuales, adúlteros, fornicadores, ladrones, mentirosos, hechiceros, etc; regresen a Dios lo antes posible de corazón; si no acogen a mi Padre, perecerán. La Advertencia es la última puerta de misericordia abierta; entren por ella; arrepientanse y obtendrán misericordia. Adelante, hermanos. Ni mi Padre, ni Nuestra Señora, ni nosotros vuestros hermanos los Arcángeles y Ángeles, ni las otras criaturas celestiales quieren verlos morir eternamente; por eso estamos exhortándolos a retomar lo antes posible el camino que los conducirá a su salvación. Reflexionen, reflexionen, reflexionen, porque la hora de la Justicia Divina está a punto de comenzar!.

Somos vuestros hermanos y consejeros: Miguel Arcángel y los Arcángeles y Ángeles del Reino de mi Padre. Gloria a Dios, Gloria a Dios, Gloria a Dios, Aleluya, Aleluya, Aleluya, Aleluya. Amén.

Hagan conocer nuestros mensajes, hombres de buena voluntad.

Origen: ➥ www.MensajesDelBuenPastorEnoc.org

El texto de este sitio web se ha traducido automáticamente. Por favor, disculpa cualquier error y consulta la traducción al inglés.