domingo, 23 de abril de 1995

Mensaje de Nuestro Señor a Edson Glauber en Manaus, AM, Brasil

Estaba en Manaus. Regresaba a casa y estaba muy cansado. Cuando llegué a casa, mis hermanos no estaban y no tenía la llave para abrir la puerta y la puerta de la casa. Estaba un poco decepcionado, ya que me quedé afuera y tuve que esperar a que mis hermanos regresaran. En este momento, escuché la voz de Jesús quien me dijo:

Mira, las puertas de tu casa están cerradas para ti, pero las puertas de mi Casa nunca estarán cerradas para ti, ni para los miembros de tu familia, familiares, amigos y vecinos, así como para todo el mundo.

Más tarde, cuando estaba rezando el Rosario de la Misericordia a las 9pm, el Señor me habló:

Anota todo lo que hayas sentido y escuchado. Mi Corazón está lleno y rico en misericordia. Entrégate totalmente a mí, así como toda tu familia a este Corazón Misericordioso mío. Confía a todos tus hermanos y hermanas y a todo el mundo a mi Misericordia. Deseo que los mensajes dados por mi Madre en Itapiranga sean conocidos y difundidos.