viernes, 5 de septiembre de 2003

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Maderno, Italia

Nuestra Señora

¡La paz esté con ustedes!

Mis queridos hijos, Yo, su Madre, los amo mucho y vengo del Cielo una vez más para bendecirlos. Sepan que mi amor como su Madre es muy grande. Deseo ayudarlos, pequeños hijos, a caminar por el camino que conduce al Cielo.

Desde hace tanto tiempo vengo al mundo para invitarlos a la conversión. Me he manifestado en muchos lugares y deseo manifestarme cada vez más en estos últimos tiempos, porque deseo ayudar a todos mis pequeños a acercarse al Sagrado Corazón de mi Hijo Jesús. Oren el santo rosario, para que el mundo se renueve y se salve. Les pedí esto en Lourdes y Fátima: oración y penitencia por la salvación de los pecadores. Oren y conviértanse, porque mi Corazón aún sufre cuando veo un alma condenada a los fuegos del infierno. Den todo de sí por la salvación de sus hermanos y hermanas y para que el amor de Dios sea conocido en el mundo. Los bendigo y los acojo en mi Inmaculado Corazón. Soy su Madre maternal y deseo que cada uno de ustedes sea una luz en este mundo que ya no ama a Dios y lo adora como se merece.

Los invito en estos días a orar mis 7 dolores pidiendo la conversión de los pecadores más implacables y de corazón duro, para su conversión. Oren y recibirán en abundancia las gracias del Cielo.

Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!