lunes, 25 de septiembre de 1995

Mensaje de Nuestra Señora

¡Quiero darles de nuevo mi AMOR! y la inmensa Gracia de mi Presencia. Continúen, mis queridos hijos, viviendo todos los Mensajes que les doy. con AMOR.

Quiero, mis queridos hijos, darles toda mi Gracia, darles toda mi Misericordia, darles todo mi Amor Maternal. Yo, queridos hijos, lleno mi Inmaculado Corazón con Gracia cada vez mayor para dar a mis hijos: - El AMOR que viene del Cielo, ¡que viene de DIOS!

A través de la oración purifico sus corazones y los preparo para recibir el DIVINO Don del Espíritu Santo. Con Mis propias Manos elimino las manchas de sus corazones, para presentarlos inmaculados y puros ante DIOS.

Queridos hijos, el mundo se acerca a catástrofes serias, y eventos dolorosos se ciernen sobre ustedes, pero la dureza, la ceguera de sus corazones, les impide ver las Señales de los Tiempos, que ya están ocurriendo.

Miren, mis hijos, la propagación del odio, la falta de fe, la incredulidad, la lucha contra el AMOR de DIOS!!! Miren, mis hijos, la indiferencia, miren las plagas, el hambre, las guerras. Miren, queridos hijos, el total desequilibrio del clima del planeta, ¡que ya están sintiendo y probando!

Todo esto, mis queridos hijos, es prueba de que Mis Mensajes son serios y correctos. Todo lo que predije debe ahora hacerse realidad, debe ahora ser totalmente verificado.

Finalmente, cuando aparezca el hombre malvado y perverso, que traerá desolación, apostasía y oscuridad general a los corazones, entonces, mis hijos, el enemigo alcanzará el punto más alto que desea: - Controlar a toda la humanidad y todas las cosas, social, económica y política, religiosa y civil.

Pero después de que el enemigo cante orgullosamente su victoria, el Sagrado Corazón de Jesús Inmaculado, con un trueno fuerte, eclipsará su maldad, y entonces no se reirá con tanta pretensión como lo hace ahora de DIOS.

El enemigo será pisoteado, y mi Inmaculado Corazón desgarrará la oscuridad que habrá extendido en el mundo. Hará brillar la LUZ de nuevo, queridos hijos, y entonces, mi Inmaculado Corazón TRIUNFARÁ, ¡y vendrá para siempre!

No esperen las últimas advertencias que les daré, ¡para que se conviertan! No esperen, mis hijos, a que estas cosas sucedan, para que se conviertan!

Ustedes esperan a que suceda, ¡y luego rezan! Oren, mis hijos, por todas las cosas buenas en estos Mis Mensajes, porque cuando los hombres quieran vivirlos y creer en ellos, será demasiado tarde.

Abran sus corazones, mis hijos, ahora, porque DIOS está derramando sobre ustedes el FUEGO del Espíritu Santo, este FUEGO, mis hijos, que está ardiendo en ustedes ahora, por la Presencia de la Madre del Cielo en tantos lugares, con tantas advertencias!

Esta Gracia, pronto ya no la tendrán! Por lo tanto, les pido, mis queridos hijos, que continúen rezando el Rosario todos los días, atendiendo a mi Madre y urgente invitación a la conversión. El Rosario, mis hijos, es la medicina que el mundo necesita en estos tiempos!

Continúen yendo a confesión todos los meses, a comulgar con amor, a participar fervorosamente en la Santa Misa, a decir no más y más a las cosas del mundo, y a abrir los ojos para ver las Señales de los Tiempos, que ya están ocurriendo en Brasil y en todo el mundo, para que cada uno de ustedes, mis hijos, crea en estos Mis Mensajes, para que cada uno de ustedes, mis hijos, logre la salvación en DIOS!

He aquí, les digo, para que cuando suceda sepan, mis queridos hijos, que cuando el hombre esté instalado en el poder del mundo, verán que la (tribulación) marginación suceda, verán, mis hijos, el desprecio. Vivirán en la soledad y el abandono más completos, por parte incluso de las personas que dicen amarlos, pero cuando se vendan a él, estarán en contra de ustedes.

¡Pero tengan confianza! ¡Coraje, mi Hijo Jesús ha ganado el mundo, y ustedes, de la misma manera, sufrirán y ganarán!!! No tengan miedo, mis queridos hijos!!!

Cuando esto suceda y vean, queridos hijos, a todo el mundo profesando el nombre blasfemo, el nombre del Anticristo; cuando vean marcas, inscripciones; cuando vean un censo mundial, el impresor de esta marca, sabrán, mis hijos, que ha llegado la Hora de la Gran Apostasía.

¡Corran! Corran, mis hijos, a mi Inmaculado Corazón, cuando la luz desconocida ilumine la Noche!!! Así les pido, ¡conviértanse! ¡conviértanse!

Este tiempo que DIOS me ha dado para estar con ustedes, con estos Mis Mensajes, es el Tiempo de Gracia! Mis hijos, no pierdan las Gracias de mi Corazón! ¡Conviértanse!!! ¡Conviértanse!!! ¡Conviértanse!!!!

Gracias por el amor que Me desean. Escriban este Mensaje hoy, y difúndalo rápidamente. Como ya he dado un Mensaje aquí para alertarlos, ahora doy este Segundo Mensaje para los tiempos difíciles que se avecinan.

Los bendigo, mis hijos, con AMOR, en el Nombre del Padre. el Hijo. y el Espíritu Santo. Permaneced en la paz del Señor".