viernes, 19 de octubre de 2007

Mensaje de la Muy Santa María:

Queridos hijos, es necesario despojarse del hombre viejo para vestir al hombre nuevo en Cristo. Mi Inmaculado Corazón es la fuente pura donde el hombre viejo entra y sale purificado, renacido, completamente renovado en Cristo Jesús. Hasta que el hombre viejo muera dentro de ustedes, el hombre nuevo no puede nacer. El hombre viejo y el hombre nuevo no pueden vivir juntos dentro de ustedes, pues eso es imposible. No hay reconciliación posible entre uno y otro, así que si el hombre nuevo no está en ustedes, solo el hombre viejo puede estar en ustedes. Así que despojen al hombre viejo, renuncien a él, para que el hombre nuevo renovado en Cristo pueda nacer en ustedes. Para que esto suceda, recurran incesantemente al poder y la virtud de Mis Lágrimas, rogando constantemente al Padre Eterno a través de ellas por la gracia de su total conversión del hombre viejo al hombre nuevo. Quien pida al Padre Eterno en el nombre de Mis Lágrimas y a través de ellas, será renovado y purificado por el amor del Espíritu Santo que siempre atiende amorosamente todo lo que le pido. Quien constantemente ora el Rosario de Mis Lágrimas con fervor y amor, será purificado por Mis Lágrimas, que tiene la virtud de convertir, liberar y conducir al Señor de salvación y paz. Les bendigo, Marcos, mi hijo más amado, con todos aquellos que han venido a orar sinceramente con ustedes hoy. Continúen con todas las oraciones que les he dado aquí. Están salvando muchas almas.