domingo, 27 de junio de 2010

Fiesta de Nuestra Señora de Perpetuo Socorro y Conmemoración del 30º Aniversario de las Apariciones de Medjugorje y Fiesta de Nuestra Señora

Mensaje de Nuestra Señora

Amados hijos, hoy con Amor renovado en mi Corazón, vengo a ustedes una vez más para llamarlos a la conversión, al amor, a la paz.

Aunque he estado apareciendo durante tantos años en Medjugorje y Aquí, llamando a Mis Hijos a una conversión sincera, la mayor parte de la humanidad aún está lejos del Señor, lejos de Su Amor, lejos de az, conversión y salvación. Aunque estoy cansada, ¡no me desanimo Mis Hijos! Continuaré luchando por su salvación hasta el final, ningún sufrimiento es demasiado pesado o demasiado duro para salvarlos Mis hijos. Lucharé, lucharé con todo Mi Amor para salvarlos, solo no salvaré a aquellos que conscientemente y voluntariamente no quieren, no quieren cambiar sus vidas, no quieren obedecer Mis Mensajes, no quieren renunciar a Su voluntad para hacer la voluntad del Señor y la Mía. Miren Mis hijos, si con tantas de mis apariciones alrededor del mundo, en Medjugorje, Aquí, todos los días el número de aquellos que me responden SÍ es tan pequeño. Imaginen si no hubiera venido, si no hubiera venido a llamarlos, si no hubiera aparecido, si no hubiera venido a invitarlos a la conversión y a atraerlos a la salvación con Mis Mensajes!

Vea entonces, Mis hijos, cuán grande es el Amor de Dios y el Mío por ustedes, y cuán grande es la dureza de sus corazones. Abran sus corazones, invoquen al Señor con confianza y serán salvados, es decir, regresen verdaderamente al Señor con sus corazones contritos, humildes, arrepentidos y abiertos y serán salvados. Si invocan al Señor de esta manera, Él vendrá, Yo vendré, con las super abundantes gracias de salvación para salvarlos, para transformar su vida en un pequeño Paraíso, donde la paz, donde el amor, donde la santidad, la pureza y Dios mismo siempre reinarán, siempre estarán presentes.

Mis Mensajes de Medjugorje y de aquí los llaman a vivir una vida verdadera en Dios, una nueva vida en Dios. Están llamados a ser los amados hijos del Señor, que siempre están con Él, que siempre trabajan con Él y que son los herederos de Su propia Gracia y felicidad, de Su gloria y de Su eterna benevolencia. Están llamados a vivir una vida maravillosa, extraordinaria y muy alta. Si quieren lograrlo y vivirlo, basta un acto de su voluntad, solo un SÍ y prometo que los tomaré, que los ayudaré a llegar y vivir esta verdadera vida en Dios.

Vine aquí y vine en Medjugorje para traer a todos ustedes, mis hijos de estos últimos tiempos, los trabajadores de la última hora, a la santidad más alta y más consumada. Si ustedes, Mis hijos, son dóciles a Mí, los transformaré en copias verdaderas de los Ángeles del Cielo, ángeles de amor, ángeles de obediencia, ángeles de perfección, ángeles de gracia. Ustedes son Mis queridos hijos, Mis apóstoles de la paz. Vayan, pues, haciendo Mis Cenáculos de casa en casa, llevando Mis Mensajes de paz, de conversión a todos, llevando la gracia que emano de este Lugar, que emano de Medjugorje, a todos ustedes, a todo el mundo. Si hacen lo que les pedí, muchas almas serán salvadas y habrá paz. Justicia, verdad, equidad, caridad, concordia, paz y amor triunfarán sobre la injusticia, la impiedad, la violencia, la discordia, el desapego y el mal entre los hombres. Y entonces nos levantaremos, construiremos juntos, usted y Yo, un nuevo mundo de paz, el mundo de Mi Inmaculado Corazón, el mundo de Dios.

Cada Ave María de mi Rosario, que rezan con su corazón, es un ladrillo extra que colocan en la construcción de este nuevo mundo de Dios, el mundo de Jesús, el mundo de María, el mundo de mi Inmaculado Corazón. Ustedes son las cuentas vivientes de mi Rosario y como tales deben unirse a mí en una oración continua e incesante ante la Santísima Trinidad, para obtener de ella aún la gracia, la misericordia y la salvación para tantos de mis hijos que están muy lejos de mi corazón. Cuento con ustedes para atraerlos a todos a mi Corazón, para que también pueda salvarlos.

El tiempo apremia Mis hijos, Mis apariciones Aquí y en Medjugorje son las últimas para la humanidad, es por eso que aparecí allí y Aquí durante tantos años. Pronto este tiempo terminará, este tiempo de gracia terminará y ya no escucharán Mi voz llamándolos, Mis palabras ya no resonarán en sus oídos: - Mis queridos hijos, ¡recen, recen! Porque Mi voz silenciará a ustedes, y entonces comenzarán a remolcar el trueno de la Justicia Divina y los gritos de los demonios que vendrán a buscar a todos aquellos que no quisieron escuchar Mis llamadas, Mis oídos, Mis Mensajes.

Conviértanse rápidamente Mis hijos! Ya casi no queda tiempo, su tiempo casi se ha agotado, levanten sus manos conmigo todos los días pidiendo que Él aún espere a los pecadores que aún están por convertirse para finalmente ejecutar Su Justicia.

Yo, su Madre, estoy con ustedes en todo momento y coloco Mi Mensaje de paz en sus manos, para que lo lleven a todos Mis hijos en todo el mundo como una paloma de paz que trae el Mensaje del Señor, de salvación y paz a todo el mundo!

A todos hoy, bendigo Pellevoisin, Medjugorje y Jacareí".