martes, 14 de septiembre de 1999

Fiesta del Triunfo de la Cruz

Mensaje de Jesucristo dado a la Visionaria Maureen Sweeney-Kyle en North Ridgeville, EE. UU.

"Soy tu Jesús, nacido Encarnado. Vengo a ti hoy para ayudarte a entender el valor de la cruz. Si no me hubiera rendido a Mi Cruz, no habría redención. Pero porque acepté la muerte en la Cruz como la Voluntad del Padre, la humanidad ha sido redimida."

"Así es con cada cruz en la vida de cada alma. El Padre permite la cruz, ya sea para el propio bien del alma, o como sufrimiento redentor por otro. Si el alma no se rinde a la cruz, se convierte en una gota de lluvia que cae del cielo. Un momento está sobre ti - al momento siguiente se evapora. Pero cuando el alma se rinde a cada cruz - es decir, acepta la cruz en imitación Mía y no lucha contra ella - la cruz cambia. Se convierte en un tesoro eterno, que yo guardo para el alma lejos de todo lo temporal en el mundo. Puedo sacar provecho de ese sacrificio - esa rendición - una y otra vez para la salvación de muchos."

"La cruz que aceptas por Mí es como un profundo manantial donde puedo ir y sacar gracia una y otra vez. O es como una joya que depositas a Mis pies. La luz de Mi Corazón brilla sobre ella dándole un brillo eterno - un mérito eterno."

"Las cruces que no se aceptan pesan sobre el alma. Pero a medida que aceptas la cruz por Mí, se vuelve más y más ligera."

"Querrás hacer esto conocido."