sábado, 6 de abril de 1996

Mensaje de Dios Padre a Edson Glauber

Hijo mío, no tienes nada que temer. Ten confianza y no te desanimes. Tú y mi hija siempre deben orar juntos y unidos. Debes pedir, insistir en tus oraciones, haciendo súplicas a Mí, tu Señor, y no dudar. Debes por los méritos de mi Divino Hijo pedir cada necesidad de Mí, tu Padre. Solo de esta manera, podré realizar entre vosotros grandes maravillas para la mayor magnificencia del nombre de mi Hijo y para mi gloria, la gloria de tu Dios.

El 07.04. 96 - a Maria do Carmo

Hoy es el cumpleaños de mi madre. Ella está en Itapiranga. En este día falleció fray Miguel Ángel. Nuestra Señora se apareció a mi madre y le dio un mensaje:

Edson está orando por fray Miguel Ángel, pero mi hijo Miguel Ángel ya no necesita oración, pero está recibiendo las oraciones de los que rezan por su alma y las está dando a Dios por todas las almas necesitadas en el purgatorio.

Él no pasó por el purgatorio, sino que fue directamente al cielo. Hoy vive junto con los Ángeles y Santos del Señor, porque ya es un santo. Aquí estaba muy cansado, pero en el cielo no está cansado, sino muy activo, intercediendo ante Dios por todas las personas que están rezando por su alma y las está dando a Dios por las almas más necesitadas en el purgatorio. Ya es un santo. Él falleció, pero la muerte es una forma de decir: pasó de esta vida a la vida eterna y sonriendo conmigo. Oró mucho, abrió y tuvo muchas cenáculos abiertos en mi honor. Soy Nuestra Señora del Rosario y te bendigo: en nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!