lunes, 3 de junio de 1996

Mensaje de Dios Padre a Maria do Carmo

Para Maria do Carmo:

Fe y confianza. Ten mucha fe. La fe es un Don especial que te he dado a cada uno de vosotros. Por lo tanto, reza al Espíritu Santo para que aumente tu fe. Vengo a bendecirte con todo mi Corazón: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén.

Para Edson:

Lleva mi bendición a tus familias. Soy el Señor, que los ama tanto.

Soy tu Dios y Creador, que viene a derramar sus bendiciones sobre todos vosotros.

Queridos hijos, tened coraje. Nunca os desaniméis en vuestro camino. Os tengo como mis pequeños hijos. Soy vuestro Padre Amado. Recibid mi amor misericordioso, mi amor eterno, que es tan grande. Este amor sagrado es para todos vosotros.

Soy la Paz, y deseo que mi paz esté con todos vosotros. Rezad, rezad y convertíos. Os amo tanto. No cerréis vuestros corazones, sino abridlos a mi voz y escuchad todo lo que os digo. Tengo muchas gracias para todos vosotros. Rezad, rezad. Os bendigo: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. ¡Nos vemos pronto!

Este es uno de los raros mensajes que el Padre Eterno se ha dignado transmitir a mi madre. Cuando nos habla, nos sentimos tan pequeños, como nada ante su Majestad Divina y Grandeza. ¿Quién puede realmente comprender el inmenso amor que Dios tiene por todos sus hijos? Sólo aquellos, como Jesús nos dice en el evangelio, a quienes el Padre quiere manifestar y revelar.