viernes, 25 de marzo de 2011

Viernes, 25 de marzo de 2011

Viernes, 25 de marzo de 2011: (Anunciación)

María dijo: Mis queridos hijos, me alegra que todos ustedes hayan podido venir a compartir mi fiesta con mi Hijo en la Misa. En todo momento los llevo a mi Hijo a través de mi intercesión. Nuestros dos corazones están siempre unidos, y queremos estar unidos a sus corazones también. Cuando el Ángel Gabriel vino a pedirme que aceptara ser la Madre de Dios, supe que estaba preparada para ese momento. Estaba feliz de decir ‘Sí’ y dar mi respuesta de fiat para seguir la Voluntad de Dios en todo. Saben que viví una vida sin pecado, pero fue solo por el poder de Dios y uniendo mi voluntad a la Suya. Amo a todos mis hijos y pongo mi manto de protección sobre todos ustedes. Llámame en sus peticiones y se las daré a mi Hijo. Les dije a los sirvientes en Caná que hicieran lo que Él les diga. Nunca obligué a mi Hijo a hacer nada, pero siempre le presenté las necesidades del pueblo. Incluso como he entregado mi voluntad a la Voluntad Divina de Dios, les doy esto como ejemplo a mis hijos. Cuando entregan su voluntad a la Voluntad de Dios, están aceptando Su misión para ustedes, incluso si Él los pone a prueba más allá de su zona de confort. No se preocupen porque mi Hijo nunca los pondrá a prueba más allá de su resistencia, y les dará la gracia necesaria para llevar a cabo su misión. Así que digan ‘Sí’ a Jesús en todo lo que les pida.”

Jesús dijo: “Mi pueblo de esta iglesia, estoy agradecido por sus muchas devociones de Cuaresma y por honrar a Mi Santísima Madre. Sus Vías Crucis fueron muy sinceras, al igual que sus rosarios en su procesión a la luz de las velas. Cuando estoy en su presencia en Mi Santísimo Sacramento durante la Adoración, puedo mirar en cada corazón mientras escucho sus intenciones individuales. Todas sus oraciones son escuchadas, y las responderé en su debido tiempo. Cuando están formulando sus intenciones, concéntrense en oraciones que ayuden mejor a las almas. Las cosas de este mundo están pasando, pero sus almas vivirán para siempre. Escucho sus oraciones por las almas que están en mayor peligro de perderse porque salvar almas debería ser su mayor preocupación también. Manténganse cerca de Mí en sus oraciones diarias, y estarán en el camino estrecho al cielo.”