domingo, 3 de junio de 2012

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Marsella, Francia

Hoy apareció la Sagrada Familia. Los tres vestidos de oro, en la Fiesta de la Santísima Trinidad. San José tenía al Niño Jesús en sus brazos y Nuestra Señora estaba a su derecha. Nuestra Señora dijo el siguiente mensaje:

¡La paz esté con vosotros!

Mis hijos, Yo, Mi Hijo Jesús y San José estamos aquí delante de vosotros para bendeciros y para acoger a vuestras familias en Nuestros Sagrados Corazones. Glorificad el Santo Nombre del Señor. Dad gloria a Dios, agradeciéndole por su inmenso amor y misericordia.

Mis hijos, rezad siempre con más fe y amor. Dios desea la conversión de la humanidad, pero muchos de mis hijos no escuchan mis mensajes y cometen pecados terribles.

Dios ha concedido tantas gracias en Francia, pero muchos aún no tienen fe, porque se dejan engañar por Satanás y las cosas del mundo.

¡Hijos, despertad! Satanás quiere destruir vuestras familias. No os dejéis cegar por él. Luchad contra todo mal siendo hombres y mujeres de Dios. Abrid vuestros corazones y arrepentíos de vuestros pecados.

Este es el tiempo para un cambio de vida. Abrid vuestros corazones. Abrid vuestros corazones. Abrid vuestros corazones y tendréis la paz y el amor de Dios en vuestras vidas. Os bendigo a todos: en nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!

El Niño Jesús tenía en sus brazos un ramo de muchas rosas. Estas rosas, que representaban gracias, las dio a San José quien las distribuyó a todos nosotros. El Niño Jesús dijo:

¡Distribuíd estas rosas a quien queráis!

San José las distribuyó a todos en la Iglesia. Inmediatamente después, San José nos dio el siguiente mensaje:

Bendigo a vuestras familias y por mandato de Mi Hijo Jesús, os concedo las gracias de Mi Sagrado Corazón. Mi Corazón está abierto para que extraigáis todas las gracias de él. Jesús desea hacer del pueblo francés un pueblo de fe y oración. Pedid Mi ayuda y tened devoción a Mi Corazón y Dios os concederá grandes gracias. Os bendigo a todos: en nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!