domingo, 27 de septiembre de 2009

Mensaje del Corazón Santísimo de San José

¡Mis queridos hijos!

¡Mi CORAZÓN AMADO tiene sed de vuestro amor! Busco una gota de amor en vuestros corazones. Y si la encuentro, os prometo: verteré un río, un mar de Amor de mi Corazón en vuestras almas.

Llamo a la puerta de vuestros corazones. Espero vuestra invitación para entrar. En Mis Manos, tengo Mi Corazón Santísimo para ofreceros y daros. ¡A esa alma que abra la puerta de su corazón, que acepte el Amor de mi Corazón! Prometo. Prometo transformarla en una verdadera joya de rara belleza, una flor de perfume exótico e incomparable. Prometo transformarla en un horno que nunca se enfría ni disminuye, ¡prometo hacer brillar una luz más brillante y atractiva en ella que las propias estrellas!

¡Dichosa es el alma que recibe Mi Amor! porque nunca se convertirá en un desierto seco.

¡Dichosa es el alma que cree en Mi Amor! porque por su fe siempre lo poseerá; y por esta razón su corazón nunca experimentará la amargura de la soledad, la desesperación, la impotencia.

¡Dichosa es el alma, que acepta el Amor de mi Corazón y se entrega a mí totalmente, porque yo también me entregaré a ella totalmente y la transformaré en mi propio hogar!

Yo, así como trabajé la madera en Mi Taller de Nazaret, trabajaré su alma, ¡hasta darle formas hermosas, impresionantes y verdaderamente asombrosas! Le daré la forma de la perfección, la santidad y le imprimiré un fino acabado espiritual, ¡para que se convierta en una pieza de gran valor y apreciable perfección!

Todo esto lo haré en el alma que confía, que se entrega completamente a Mí; y que no desconfía de Mis Planes, Mis Intenciones y Mi Amor por ella.

A todos hoy bendigo y repito:

Continuad con Mi HORA DE ORACIÓN y todas las demás que os he dado aquí, porque a través de estas 'HORAS' os transformaré en una hermosa 'Obra de Arte' 'Mística y Espiritual' para embellecer vuestras Moradas en el Cielo.

Paz, Mis Hijos".