Mensajes para Marcos Tadeu Teixeira en Jacareí SP, Brasil
domingo, 18 de diciembre de 2016
Mensaje del Sagrado Corazón de Jesús

(Sagrado Corazón de Jesús): Mis amados hijos, hoy mi Sagrado Corazón se alegra de veros de nuevo Aquí en mi casa, en la casa de mi Madre donde os bendigo verdaderamente a cada uno de vosotros, os colmo de las gracias de mi Sagrado Corazón y os doy la Paz.
Vivid en Paz y abridme vuestros corazones, dejad que Mi Sagrado Corazón entre en vuestro corazón y transforme completamente vuestra alma en Mi jardín de las delicias, Mi segundo Paraíso, Mi pequeño Cielo.
Os invito de verdad hoy a dejar que Mi Sagrado Corazón entre en vuestro corazón para que Mi Corazón en vuestro corazón pueda vivir, reinar y hacer maravillas.
Mi Corazón en tu corazón debe vivir cada día. Por tanto, debéis abrirme las puertas de vuestro corazón, dejarme entrar, dejarme hacer Mis maravillas en vosotros, vivir y reinar en vosotros, y realizar verdaderamente las grandes gracias y los grandes planes de amor que tengo para vosotros.
Por tanto, vivid una vida de continua unión Conmigo, creciendo cada día más en la oración, uniendo vuestra voluntad a la Mía, renunciando a las cosas mundanas y a vuestra voluntad, y abriendo vuestros corazones a una gran capacidad de amarme.
Mi Corazón en tu corazón debe vivir cada día, así que tú debes vivir en Mí y entonces Yo viviré en ti. Permanece en Mí y Yo permaneceré en ti.
No puedes permanecer siempre sin defectos, pero siempre puedes permanecer en Mí y eso es lo que quiero a pesar de tus defectos y miserias, quiero que permanezcas en Mí, quiero que vivas en Mí por verdadero amor.
Y entonces, Yo también viviré en ti, Yo también permaneceré contigo, y cuando permanezco con un alma hago que produzca mucho fruto de amor y de santidad. Mi Corazón en tu corazón, así debemos vivir cada día.
Podréis vivir con Mi Corazón en el vuestro si apartáis de vuestro corazón todo lo mundano, todo lo que un día os separó de Mí, os apartó de Mí y Me impidió comunicaros Mis Gracias.
Y si alguno vive todavía así, atado a las cosas mundanas, atado al mal, al pecado, impidiéndome comunicar Mis Gracias, dejad hoy estas cosas. Y comunicaré Mis Gracias a este corazón, al corazón de este hijo Mío, y le haré rico, rico de Mi Gracia, rico de Mi Amor.
Mi Corazón en tu corazón, así, Nuestros corazones serán uno en Mi Llama de Amor, que es el Espíritu Santo. Entonces, verdaderamente, Nuestros corazones serán uno, Nuestra voluntad será una y el Padre vendrá conmigo y haremos de este hijo Nuestra morada.
Juntos cenaremos y seremos felices para siempre y todo lo Mío será también del hijo que así viva unido a Mí y le comunicaré Mis riquezas, las riquezas de Mi Gracia, Mi felicidad eterna y finalmente Mi gloria eterna en el Reino de los Cielos.
Mi Corazón en tu corazón, así, Nuestros corazones ya no serán dos sino uno y tendrán los mismos sentimientos, el mismo amor, tendrán la misma alegría, tendrán la misma riqueza. Porque Mi Corazón compartirá con tu corazón todas las riquezas infinitas que posee y todo será tuyo. Y entonces, viviremos juntos para siempre y nada podrá separarnos.
Entonces ya no serás tú quien viva, sino Yo quien viva en ti. Entonces tu vida será ya un comienzo del Cielo, del Paraíso Aquí en la Tierra y sólo la continuarás allí, en la casa de Mi Padre.
Si Nuestros Corazones son uno, realmente no habrá más soledad para ti, ni más tristeza, y tu vida tendrá sentido, porque el sentido de tu vida y la razón de tu vida seré Yo.
Y entonces ésa será la luz de vuestras almas, la luz de vuestros ojos, y esa luz os iluminará cada día de vuestra peregrinación aquí en este mundo. Y entonces, cuando por fin lleguéis a la casa del Padre veréis que vuestra vida no era vuestra, sino que era mi vida, que vuestro amor era mío, que vuestra alegría era mía, que vuestros dolores también eran míos y vuestra victoria, vuestra gloria eterna también será mía.
Vivamos así, Nosotros, unidos, seamos un solo corazón y Mi Corazón en tu corazón hará maravillas irradiando Mi Espíritu Santo y Mi Llama de Amor para la conversión y la salvación del mundo entero.
A vosotros, mis queridos hijos, a quienes amo tanto y a quienes he atraído aquí con vuestra Madre, os pido a todos: Rezad, rezad más la Hora de mi Sagrado Corazón, porque a través de ella pondré siempre mi corazón en vuestro Corazón y haré que mi Corazón viva en vosotros.
Rezad también el Rosario de la Misericordia, porque a través de él os daré grandes gracias, sobre todo la de una profunda unión conmigo.
A todos vosotros, a mi amado hijo Marcos Tadeo y a todos mis fieles servidores, entre ellos a mi amado hijo Carlos Tadeo, a quien yo y mi Madre amamos con todo nuestro corazón.
Y que también queremos unir con nosotros y con nuestro amado Marcos en un solo corazón hasta que juntos latan, juntos irradien la luz del amor, juntos sufran, juntos lloren y juntos también triunfen y se alegren.
Nosotros que queremos hacer ese hijo maravilloso de Nuestro Amor junto a Nuestro pequeño Marcos, para que el mundo por fin sienta Nuestro Amor, comprenda Nuestro Amor. Y sobre todo, comprenda el amor del Padre, sienta el amor del Padre por Sus hijos y sepa también cómo debe ser el verdadero amor filial de un hijo por el Padre Celestial.
A Él y a todos vosotros, a quienes tanto amamos, bendecimos ahora desde Dozulé, desde Fátima y desde Jacari».
(María Santísima): «Queridos hijos, hoy os invito a todos a abrir vuestros corazones a Mi hijo Jesús, que viene en Su Segunda Navidad.
«Vuestra segunda Navidad está cerca, por eso debéis preparar vuestras almas para ser el nuevo Belén de mi hijo Jesús.
Sed el nuevo Belén de mi hijo Jesús, pero no el Belén que no dio lugar a él y a mí. Sino la nueva Belén, la que acoge a su Salvador que vuelve en gloria.
El Belén que acoge a su Mesías, a su Redentor y a su Rey rindiéndole los honores de su amor, de su obediencia, de su adoración y, sobre todo, del amor más tierno y profundo del alma.
Sed el nuevo Belén de mi hijo Jesús preparándole una digna morada en vuestras almas, viviendo cada día en oración, huyendo del mal y del pecado, renunciando a las cosas mundanas, entregando vuestros cuerpos a Dios, a mi Hijo, pues al dar los cuerpos se dará también el espíritu.
Cuántos son los que se engañan diciendo que ya han entregado su corazón a Mi Hijo, pero siguen entregando su cuerpo a las cosas mundanas. Dad a Mis hijos el cuerpo a Mi Hijo, y entonces el corazón irá junto, porque, aunque tengáis espíritu estáis en el cuerpo y el espíritu y el cuerpo caminan juntos.
A lo que se da el cuerpo también se da el espíritu, así que dad el cuerpo a Mi Hijo y el espíritu también será Suyo, el corazón será Suyo.
Sed el nuevo Belén de mi Hijo Jesús preparando para Él en vuestros corazones, en vuestras almas una morada digna de Rey, colocando para Él:
Las alfombras de vuestra humildad, de vuestra docilidad, de vuestra obediencia a Su Ley de Amor.
Las cortinas reales de la Fortaleza, de la Esperanza de la Fe, de la Caridad.
El trono de tus oraciones, de tus sacrificios. El cetro de la obediencia filial y de vuestra disponibilidad hacia Él.
La corona del verdadero amor de vuestros corazones hacia Él y el deseo sincero de ser completamente Suyos y de no separaros nunca más de Él ni herirle con el pecado.
El manto de adoración perfecta de todos vosotros hacia Él.
El incienso, el oro y la mirra de vuestra vida ofrecidos completamente a Él por amor y con amor.
Entonces seréis verdaderamente la nueva Belén de mi Hijo Jesús, la buena tierra que acoge a su Salvador con amor y recibe a su Salvador con adoración, humildad, obediencia y gratitud.
Entonces mi Hijo vendrá y reinará en vosotros, hará en vosotros sus maravillas de amor, y a través de vosotros renovará toda la faz de la tierra.
La segunda Navidad de Mi Hijo está cerca, así que empezad a prepararos ahora para ser su nuevo Belén, donde Yo pueda reclinarlo en vuestros corazones. Y así seréis verdaderamente la cuna más hermosa, iluminada, fragante y cálida para vuestro Salvador y su Rey que vuelve a vosotros en gloria.
Seguid rezando el Santo Rosario todos los días, porque a través de él os transformo cada vez más en el nuevo Belén para entregarlo a mi Hijo Jesús.
Seguid difundiendo Mis apariciones en Bonate, porque el año que viene vendrán muchos castigos porque no se hace casi nada por Bonate, no se da a conocer el Mensaje de Bonate.
Y a excepción de Mi pequeño hijo Marcos, que hizo el vídeo de Bonate y lo difundió a todo el mundo y de algunos de Mis hijos que luchan poco se habla de Bonate, poco se hace en reparación a Mi Mensaje de Bonate.
Da Mi Mensaje al mundo, es la mayor reparación que quiero. Difundid Bonate en los grupos de oración y cenáculos, pasando a Mis hijos para que vean el vídeo que Mi hijo Marcos hizo de Mi Aparición.
E incluso dad este vídeo a Mis hijos, para que verdaderamente la espada que pende sobre muchos países, incluida Italia, sea retirada, el castigo sea eliminado y una nueva cosecha de gracia del Cielo venga al mundo.
Os amo y os bendigo a todos desde Lourdes, Loreto y Jacareí.
En Nochebuena volveré aquí con mi Hijo Jesús, os espero a todos para daros la bendición del pequeño Príncipe Jesús, el Rey de Reyes, el Señor de Señores.
Os dejo paz a todos, hasta pronto. Hasta pronto.
Orígenes:
El texto de este sitio web se ha traducido automáticamente. Por favor, disculpa cualquier error y consulta la traducción al inglés.