viernes, 11 de enero de 2013

Viernes, 11 de enero de 2013

Viernes, 11 de enero de 2013:

Jesús dijo: “Mi gente, en el Evangelio de hoy, un leproso se acercó lo más posible a Mí porque tenían que mantenerse alejados de la gente.

Me preguntó si podía curarlo, y yo quise hacerlo. Lo curé porque tenía fe en que podía curarlo. Incluso toqué a algunos leprosos para curarlos, y esto normalmente estaba prohibido. Este es un ejemplo de cómo yo incluso extendí la mano para curar a los marginados de la sociedad porque amo a todos. Puede que no puedas curar a la gente, pero este Evangelio es un ejemplo de cómo quiero que Mis fieles se acerquen a todos con amor. Incluso aquellos en prisión, aquellos en residencias de ancianos y aquellos con enfermedades contagiosas necesitan ser amados. Las personas con problemas de alcohol y drogas también necesitan ser amadas. Es difícil salir de tu zona de confort para intentar ayudar a los marginados de tu sociedad. Esto es algo que todos Mis fieles deberían intentar hacer porque me ves en sus almas. Oren por estas almas, incluso si no puedes ayudarlas físicamente.”

(Misa por Dennis) Jesús dijo: “Mi gente, fueron las oraciones y las Misas las que salvaron a Dennis de un destino peor. Todavía necesita más oraciones y Misas para ascender en el purgatorio. Cuando la gente abusa de sus cuerpos y no está cerca de Mí, tendrán que aceptar Mi juicio por sus actos. No es fácil para Mí ver a la gente sufrir, pero purgar las almas de sus pecados no es un espectáculo agradable. Muchas personas tienen problemas de alcohol o drogas, y estas adicciones tienen demonios adheridos a ellas. Por eso es difícil para estas personas luchar contra sus demonios y sus hábitos que abusan de sus cuerpos. Sigan orando por estas personas con adicciones porque la oración persistente podría salvarlas del infierno.”